9:30 en punto y 7 Canquetos listos para recorrer uno de los clásicos del Canqueto.
Culaco, PP, el Doc en su BMW, Carto, Willy, Fraga y Gitano. El Cosito llegó al café solamente.
Este es uno de los paseos con rutas más bellas y variadas. Hay autopistas, caminos secundarios, cuestas, vistas de campos... Todo lo que ofrece los alrededores de la ciudad de Santiago. Un paseo de casi 400 kilómetros sin alejarse más de 100 de nuestra ciudad.
Partimos por la carretera 68 hacia la costa y después del túnel Lo Prado, enfilamos por la cuesta Barriga hacia Padre Hurtado. Saliendo del túnel, una nubosidad baja con algo de frío hizo que un par de nosotros se pusiera algo encima para no cagarlas y agarrarme un resfrío de verano.
La cuesta siempre es un agrado por las vistas del valle de Curacavi y por las anchas curvas que permiten ponerle un poco.
Pasando Padre Hurtado, enfilamos hacia Peñaflor y casi a la entrada, la ley invitó a Willy a detenerse y mostrarle sus documentos. Por suerte era un control,de rutina solamente y no le pidieron explicaciones por los 140 klm por hora y por el armamento en la mochila!!...
Pasamos ese pintoresco pueblito con nuestras máquinas y enfilamos hacia Talagante (venga?... Mejor no.). Pasamos la ruta 78 a San Antonio por arriba justo donde hacemos la pasadita por el paso peatonal (uno de los muchos inventos de Willy para darle sabor a los paseos). De ahí a Isla de Maipo admirando los bellos paisajes del campo chileno. A la altura de Paine, tomamos la ruta 5 hacia el norte entrando por Linderos. Hacia Alto Jahuel.
Ahí en un pastito frente a un Club de Campo, una detención y descanso para estirar las piernas y sacarse la moto del culo.
Sensación causó mi nuevo artilugio para mi Road King. Un respaldo/parrila versátil que se puede usar cono respaldo de piloto o acompañante.
Seguimos viaje hacia Pirque admirando los bellos paisajes y viñas de precordillera.
Bencina y directo a El Melocotón en búsqueda de algún Restaurant chileno. Unas vueltas por aquí y por allá y entramos a El Campito a disfrutar de pan con pebre, porotos granados, ensaladas y alguna que otra carnecita.
Ahí el Culaco le dio al mozo, su receta secreta de como curarse las verrugas del dedo gordo, cosa que este agradeció profundamente.
No se puede ir al Cajón del Maipo sin hacer la subida de Los Maitenes para llegar a la Central hidroeléctrica del Alfalfal.
Todos estábamos de testigos del desafío entre Culaco (1200XR) y PP (Dyna Súper Glide potenciada), para ver "mano y máquina" y también empaquetaduras, o sea cojones.
El desafío era simple. Si PP ganaba, Culaco le compraba la Dyna.
Durante todo el Ride tímidamente se fueron midiendo la mano. Pero ahora era el momento.
Llegamos al Alfalfal para un descanso y a la bajada empezó la cosa.
Yo salí antes para ser de testigo cuando me pasaran.
Llevaba casi 6 kilómetros cuando me pasaron. Casi me baje de la moto ya que pensé que estaba estacionado!
Willy, que los vió salir dijo que Culaco salió primero. Cuando me pasaron, PP iba adelante.
Nadie más pudo saber que pasó.
Llegamos abajo y ni rastro de los pilotos. O se calentaron y siguieron dándole hacia Santiago, o estaban enredados en algún matorral en el fondo del Cajón!
Bueno. La verdad es que estaban un poco más allá, debajo de un arbolito, conversando.
Les preguntamos quien había ganado y la respuesta...."Nos fuimos turnando"... 😳
Váyanse a la chucha el par de weones!!!!
Bueno. El paseo fue simplemente ESPECTACULAR!!.. Una de las mejores rutas del Canqueto.
Pancho Badia