Como las típicas fiesta que uno no tiene muchas expectativas…, el pronóstico no era bueno pero ohh, sorpresa !!!, abro las cortinas a las 8 y empieza a bombear la adrenalina con el solcito que ya entraba por la ventana. Aun el pasto blanco, advertía que había que forrarse, pero ahí vamos…, a otro sábado de cuento.
Coqueto a las 9:30 nos encontramos Willy, Marcelo , Lucho (Larry), Rodrigo, Pancho y yo.
La buena conversa empezó ahí. Yo no sabía si admirarme de lo maduro que estamos, o asumir con dignidad la “vejentud”, porque los temas de conversación ya no eran esos de que: “aquí te las traigo Peter” sino que; como cuidar a “Peter” y mantenerlo motivado, jajajaja.
Algunos tomamos el jarabe energético y montamos nuestras regalonas, esas pobrecitas que nos esperan toda la semana para salir a airearse y taquillar un poquito.
Costanera Norte a ruta 78, objetivo “Cuncumén”. Para mí, nuevo destino.
Nos fuimos derechito camino a Algarrobo para salir en el cruce Casablanca y adentrarnos en la Cuesta Ibacache, pasando por Chorombo, Bollenar, San José, con bastante frío, pero solcito y a ratos una pincelada de neblina.
Las curvas que no les llegaba calor y aun mojadas por la llovizna nocturna obligaban a andar tranquilo y disfrutando el paisaje. Así llegamos a Melipilla donde despedimos a Larry porque debía regresar y enfilando hacia la costa, llegamos a “las Colinas de Cuncumén”.
Rico lugar, con silloncitos alrededor de un gran brasero y el aperitivo reponedor para esperar el almuerzo y a Hernán (Jaguayan) que salió más tarde. Un ambiente 100%, muy buena conversa y a la mesa…
El menú ya decidido por Willy para todos; “carne al tazón” con puré y ensalada…, opinión unánime; wena wena !!!
Después de almuerzo pasamos nuevamente al fogón para ver el futbol y a tomar el cafecito…, con azúcar “por si acaso”…,sinceramente lo único amargo era la cara del pobre arquero inglés…, opinión unánime; weon weon !!!
Para el regreso…,”sigamos gozando cabritos” se llamaba la película…,nueva ruta, de maravilla.
Cuncumén bajo hacia Leyda, asfalto rugoso para ponerle un poquito de fierro porque las motos se agarraban bien y gozar de viñas , campos y arboledas hasta llegar a la Autopista del Sol…,que más buscamos? , nada.
De ahí todos felices para la casa, con esa sensación que cuesta transmitir y que se resume con un ; “puta que lo pasamos bien”!!!