Canqueto Norte 2007 Dia 2 - Copiapó y alrrededores
Día 2: Copayapu y alrededores
El sábado 30, después de un necesario y reparador descanso, iniciamos el día lavando las motos para que estuviesen impecables para la severa y consabida revista que acostumbra hacernos Willy.
A las 10:30 hrs partimos a pasear por la zona, primero enfilamos por el Camino de los Japoneses, antigua ruta a Caldera atravesando el desierto, donde Felipe nos hizo su demostración de conducción en la arena.
El almuerzo fue en un puesto del mercado de Caldera ante la expectación de los transeuntes.
De ahí a Bahía Inglesa, dónde contemplamos una maravillosa vista de la Bahía en lo alto de un roquerío saboreando unos helados y por mi parte una siestecita muy recomponedora en las alturas.
¡¡ Que tarde tan relajada !! ...
El aperitivo nos esperaba en la casa de mi cuñado (Kristian Jahn) en Copiapó. Hasta ahí llegamos las 13 bestias metálicas, apurando a los dueños de casa para que nos abrieran el portón, mientras esta tranquila familia pueblerina corría para amarrar a Fermin (un boxer blanco), que ya estaba al borde del ataque cardíaco con tanto ruido.
Lo pasamos rebien, saboreando un rico salmón, ostiones a la parmesana y unos buenos copetes. A esta alturas mis tres sobrinitas estaban alucinadas con las mentiras que contaban con todo convencimiento Felipe y el Calavera, especialmente este último que les mostraba hasta los tatuajes.
Después de casi dos intensas horas, 11 pilotos emprendieron rumbo a la cena y respectivo alojamiento donde Red, para seguir al día siguiente muy temprano la ruta a Mejillones. A estas alturas, hasta Fermín se sentía ya Harlysta, ya que no ladró nada como es su costumbre a todo lo que tenga ruedas y se mueva .... vamos a tener que mandarle un pañuelo para el cuello y una bandana.
Con Alejandro nos quedamos con pena abrazados a Fermín, con sendos copetes en la mano, ya que al día siguiente iniciábamos el retorno a Santiago con una parada de una noche en La Serena, ya que por motivos laborales, y pese a todo tipo de gestiones hasta último momento, no podríamos seguir viajando con el Grupo el resto de la semana. Pero nuestro compromiso era volver a buscar a nuestros amigos a La Serena el Sábado 7 de Julio.
Nuestro regreso, por su lado tuvo también sus aventuras, con la pata de mi moto amarrada con huincha 3M ya que se rompió y esta pana tuvo como consecuencia una cuasi inmolación a lo bonzo, al quemárseme los chaps por contacto directo con los escapes, fuego que tuve que apagar revolcándome en la tierra.
Vero
Todas las fotos del segundo día, se pueden ver AQUI
El sábado 30, después de un necesario y reparador descanso, iniciamos el día lavando las motos para que estuviesen impecables para la severa y consabida revista que acostumbra hacernos Willy.
A las 10:30 hrs partimos a pasear por la zona, primero enfilamos por el Camino de los Japoneses, antigua ruta a Caldera atravesando el desierto, donde Felipe nos hizo su demostración de conducción en la arena.
El almuerzo fue en un puesto del mercado de Caldera ante la expectación de los transeuntes.
De ahí a Bahía Inglesa, dónde contemplamos una maravillosa vista de la Bahía en lo alto de un roquerío saboreando unos helados y por mi parte una siestecita muy recomponedora en las alturas.
¡¡ Que tarde tan relajada !! ...
El aperitivo nos esperaba en la casa de mi cuñado (Kristian Jahn) en Copiapó. Hasta ahí llegamos las 13 bestias metálicas, apurando a los dueños de casa para que nos abrieran el portón, mientras esta tranquila familia pueblerina corría para amarrar a Fermin (un boxer blanco), que ya estaba al borde del ataque cardíaco con tanto ruido.
Lo pasamos rebien, saboreando un rico salmón, ostiones a la parmesana y unos buenos copetes. A esta alturas mis tres sobrinitas estaban alucinadas con las mentiras que contaban con todo convencimiento Felipe y el Calavera, especialmente este último que les mostraba hasta los tatuajes.
Después de casi dos intensas horas, 11 pilotos emprendieron rumbo a la cena y respectivo alojamiento donde Red, para seguir al día siguiente muy temprano la ruta a Mejillones. A estas alturas, hasta Fermín se sentía ya Harlysta, ya que no ladró nada como es su costumbre a todo lo que tenga ruedas y se mueva .... vamos a tener que mandarle un pañuelo para el cuello y una bandana.
Con Alejandro nos quedamos con pena abrazados a Fermín, con sendos copetes en la mano, ya que al día siguiente iniciábamos el retorno a Santiago con una parada de una noche en La Serena, ya que por motivos laborales, y pese a todo tipo de gestiones hasta último momento, no podríamos seguir viajando con el Grupo el resto de la semana. Pero nuestro compromiso era volver a buscar a nuestros amigos a La Serena el Sábado 7 de Julio.
Nuestro regreso, por su lado tuvo también sus aventuras, con la pata de mi moto amarrada con huincha 3M ya que se rompió y esta pana tuvo como consecuencia una cuasi inmolación a lo bonzo, al quemárseme los chaps por contacto directo con los escapes, fuego que tuve que apagar revolcándome en la tierra.
Vero
Todas las fotos del segundo día, se pueden ver AQUI
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